¡Si Janis Joplin levantara la cabeza!

Marta García

A Janis Joplin no le salieron las cosas como quería. No solo porque las drogas le jugaron una mala pasada, sino porque su tema Mercedes Benz, una crítica social sobre cómo las personas relacionan la felicidad con lo material, se volvió en su contra. La canción terminó convirtiéndose en un éxito. Tanto, que la propia Mercedes decidió utilizarlo en algunas de sus campañas comerciales a partir de 1995.

Joplin compuso el tema en 1970, apenas dos años antes de que Mercedes decidiera denominar Clase S a su modelo 116. Nació así un buque insignia que se convirtió no solo en uno de los máximos exponentes de representación social, sino también en el muestrario de nuevas tecnologías de la marca. Hoy, el nuevo Clase S ofrece sistemas que aquella primera generación del modelo jamás hubiera imaginado.

De momento, incorpora un sistema de infoentretenimiento que la marca denomina MBUX con una potencia de cálculo un 50% superior a la de la generación anterior y capacidad de aprendizaje. Es un cerebro que puede interpretar la orientación de tu cabeza, los movimientos de tus manos y tus gestos y, en función de ellos, activar determinadas funciones del coche. Por ejemplo, si miras hacia atrás por encima del hombro, accionará el parasol de la ventanilla trasera sin necesidad de que tú hagas nada más y, si tienes algo de domótica en tu casa, podrás chequear si está funcionando correctamente. Los efectos especiales siguen con un cuadro de instrumentación en tres dimensiones. Se completan con un head up display que proyecta de forma animada los principales parámetros de la conducción en el parabrisas, aunque simula hacerlo a 10 m por delante del coche.

En una primera fase se ofrecerá con motores de seis y ocho cilindros. Más adelante llegará un híbrido enchufable capaz de recorrer 100 km en modo eléctrico. Todos, están preparados para la conducción autónoma 3, es decir, circular hasta a 60 km/h sin coger el volante. También tienen en fase de pruebas el nivel 4, que te permitirá sacar tu coche del parking de forma remota. El inconveniente es que ni las infraestructuras ni la ley estarán preparadas previsiblemente para ello porque deberán contemplar supuestos como que, por ejemplo, puedas ir leyendo mails mientras, teóricamente, conduces.

Desde luego, nada que ver con aquel modelo que se lanzó en 1972 que como gran novedad incorporaba suspensión independiente y discos de freno. Hoy, el Clase S cuenta con ruedas tr aseras directrices que reducen el diámetro de giro en dos metros. También, con unidades de control que analizan 1.000 veces por segundo la situación de marcha para asegurar su correcto comportamiento de tal manera que si hoy Janis Joplin levantara la cabeza, volvería a cantar aquello de «Oh, Señor, ¿por qué no me compras un Mercedes Benz?, pero esta vez con pleno convencimiento.